Cuando la salud está en riesgo es importante tocar base y en ocasiones regresar a lo básico; el aislamiento en 2020 fue y es hasta ahora la mejor arma de las naciones para disminuir los casos de Covid-19, situación que obligó a la educación tradicional en muchos Países del Mundo, incluido México, a tomar un nuevo rumbo, migrando a la educación en línea. Por ello es importante evaluar esta modalidad y definir sus directrices para que se desarrolle con calidad.
Para considerar un curso, programa o institución dentro de la modalidad en línea, es necesario contar con ciertas características relevantes y suficientes, que son:
➔ La permanente separación entre profesor-estudiante en espacio y tiempo.
➔ El estudio independiente del alumno: controla tiempo, espacio y ritmo de estudio. Puede complementarse con interacción síncrona para la socialización y el aprendizaje colaborativo.
➔ La comunicación bidireccional entre el profesor y el estudiante, y entre estudiantes, a través de diferentes recursos tecnológicos.
➔ El apoyo de una organización de carácter tutorial que planifica, diseña y produce materiales. Da seguimiento y motivación durante el proceso de aprendizaje (Diseño instruccional).
Dos conceptos que día con día se vuelven más comunes son Clases sincrónicas y Clases asincrónicas, donde en la primera se da la interacción y participación en tiempo real, y en la segunda, el estudiante es dueño de su tiempo y él decide qué actividades realizar.
La educación en línea de calidad no es sólo conectarse a internet y escuchar a un profesor, ésta se basa en un diálogo didáctico entre el profesor y el estudiante ubicados en espacio y tiempos diferentes. La calidad de las clases y del aprendizaje dependen de una buena planeación y diseño; se debe contar con un recurso tecnológico y un material didáctico digital estructurados y alineados a una estrategia didáctica que permita alcanzar un objetivo de aprendizaje o el desarrollo de una competencia. Sin comunicación no hay educación.
Otro punto relevante que la contingencia por Covid-19 probó es que es necesario para las instituciones educativas focalizarse también en un modelo educativo híbrido en el cual, la experiencia de aprendizaje virtual sea unificada e instintiva para estudiantes, profesores y personal y que, al mismo tiempo, se brinden tecnologías flexibles, garantizando la seguridad de los datos. Esto indica que las escuelas de educación en línea o a distancia requieren más adaptación tecnológica y esto también requiere tiempo e inversión. Las instituciones educativas deben visualizar la tecnología como su piedra angular para la creación de campus virtuales que brinden a los estudiantes una experiencia de aprendizaje unificada y segura, proporcionando la flexibilidad de acceder a todos los materiales educativos desde un único espacio utilizando cualquier dispositivo y red.
Por lo anterior podemos decir que la educación en línea se ha vuelto nuestra nueva normalidad, y por ello es importante que se desarrolle de la mejor manera y con los estándares de calidad necesarios, siempre con el enfoque de que en el cambio a educación en línea, la educación debe anteponerse a la tecnología.
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| Publicación original para: Mexicana de becas. |
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